lunes, 24 de febrero de 2014

Fábula Tercero



Una zorra entró a un rebaño lleno de corderos y se acercó a un pequeño cordero. Lo acercó a su pecho y fingió acariciarlo. El perro, que cuidaba el rebaño, se dio cuenta de lo que sucedía y le dijo a la zorra:
¿Qué crees que estás haciendo?
Solo lo acaricio y juego un poco con él -le dijo la zorra, fingiendo cara de inocencia-.
Pues si no quieres conocer mis caricias, ¡entonces suéltalo! -le respondió el perro-.

Moraleja: Al que no está preparado, sus actos le delatan.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguidores